Un encanto de toma, radica casi toda ella en esa maginigica mirada captada, en esa luz que asoma por su cabellera, en eso gesto complaciente y agradable y la supercomplicidad con el autor, que imagino que ha motivado parte de esa captacion, y en esa sonrisa autentica, capaz de abrir la fronteras del mal humror FOTON
Por
Pepe Vieitez , Hace más de un mes